Fortalecido y Solido

Como el fútbol puede mas que otras fuerzas. No deja de sorprenderme como, con fuerza imperceptible a la vista, actúa como detonante para las mas improbables y maniáticas actitudes (tanto de hinchas como de jugadores)

Desde el mas alto nivel de competencia, hasta el mas bajo escalón del amateurismo, cualquier implicado se ve afectado por el fútbol. Cualquier hincha se vuelve fanático, y cualquier improvisado jugador de ultima hora, se convierte en el mas competente deportista.

Con la promesa latente de poder disputar un encuentro en una señora cancha de fútbol, este poder casi mágico al que hago referencia se empezó a gestar. Compromisos dejados de lado, trabajos abandonados, reuniones postergadas, todo por pisar un terreno de juego mas cercano al profesional, que las garompas los barrosos campos de juego a los que estamos acostumbrados.

Semana de festejos, ya que tres de nuestros integrantes cumplían años, y desde aquí les cantamos un happy birthday to you al Bui, al Chipi y al Honguito. Y con las expectativas intactas por continuar en el improvisado torneo al que nos metimos de pedo por la ventana.

Como si esto no fuera poco, durante la semana se fueron dando ausencias, al punto de tener que buscar jugadores de otras instituciones (TuPapa y Barriletes) y fue Pucho quien nos vino a dar una mano. Para sorpresa de propios y extraños, nuestro Koala cumpleañero se manifestaría de cuerpo y forma, a pesar de haberse declarado ausente por sus festejos. "La Bergessio tira, no podía faltar" en declaraciones previas al match. Se dice que sus allegados le habrían preparado esta torta para que sople las velitas.

Cambiándose mayoría del equipo en el vestuario, la ultima noticia antes del pitazo inicial era, que en nuestro banco estaría Don Marsicano, papa y primer detractor de nuestro robusto numero 9.

Con mucha motivación, una linea de 3 ya fluida y una charla escasa pero acorde, el Reno salia con estos jugadores

La cancha se daba en la previa algo mejor de lo que estaba, producto de estos sucesos. Aun con sus falencias sobre todo en una de las áreas, era infinitamente superior a cualquier campo que el equipo piso a lo largo del 2014 (exceptuando quizás la cancha 5 de la UBA)

Con unas dimensiones enormes, el ancho de la cancha sorprendía al 9 renolero quien en pleno match parloteaba con su compañero y le decía "corrí pensando que llegaba y es enorme". Inteligente, y aprovechando semejante amplitud y espacios, el equipo disponía de la pelota y trataba de localizar el juego por las bandas (mucho mas la izquierda que la derecha)

Y gracias a esas llegadas por las bandas, rápidamente se adelantaría en el marcador. Cesión para la derecha, el 9 que toma la pelota y cabeza levantada de por medio, hace una pausa mientras el 88 picaba en diagonal. Enganchado el central rival, y frente al arquero, el honguito tuvo que empujar el balón de primera para decretar el rápido 1-0. Y con la ventaja a su favor, a lograr administrar los tiempos y las situaciones del partido.

Respaldados por una solida marca, y con entendimiento posicional sublime, el rombo defensivo (Ger;Chaca, Piqui;Bui) le daba solidez y el equipo se sentía seguro. Eso le permitía moverse con ciertas libertades a Nacho, y a los volantes externos.    

Por mas ancha que era la cancha, un corner rival casi genera el empate. Un cabezazo fuerte pero algo carente de dirección, hizo que nuestro melenudo cumpleañero tuviera que volar para salvar su valla. Y desde ahí, parecía que el orden táctico mostrado (sobre todo del medio campo) mermara. Esto era producto que el rival comenzaba a adelantarse (había arrancado con 10 y ya tenia a los 11)

Por ese adelantamiento, una linda jugada, encabezada por un buen pase de Nacho, dejaría de espaldas al tanque Marsicano, con el ultimo hombre rival. Con un movimiento típico de sus prominentes caderas, giró 180 grados sobre su propio eje para quedar mano a mano con el arquero. Desde afuera se escuchaban los gritos de Marsicano Sr, que rezaban "Picala, picala" pero el Jr optó por el camino seguro, eludió al arquero rival y definió sin oposición para marcar el dos a cero. Después de 2 remates a la bosta alejados, encontraba el gol en su tercer intento. Minutos después se ganaría una amarilla por su excesivo uso de la violencia.

Por la izquierda tricolor, faltaba que pase un microbus, porque después era una autopista (palabras del propio volante por izquierda renolero) y por ahí se jugaba casi todo el tiempo. Y por ese lugar, nuestra moneda Bryan llego a posición de gol, rematando con la marca encima, perforando otra vez la capa de ozono. Para el final del primer tiempo, el tirón de orejas para la dupla ofensiva, que decidió pelotudamente erróneamente ejecutar un corner corto rápido, en plena subida de los centrales. Este derivó en un centro para Pucho, que esta rodeado por 947 rivales aproximadamente.

Final del PT, cagada a pedos a montones. Germán para con los delanteros. El Bui para con el Cat, Marsicano Sr para con Marsicano Jr. El Reno entero para con Matias porque seguía discutiendo.

Dos cambios para la segunda mitad, y en la charla previa al saque, es el honguito quien nota y comenta con Matias, la similitud excesiva del juez para con  El Pibe Bieber posteriormente, se enterarían los delanteros que todo el equipo lo veía así. Pitazo y frase del 88 "Cuidate con la amarilla que tenes". "Traaaaanqui que no pasa nada" fue la respuesta recibida.

En esta segunda mitad, se vería a una linea defensiva tan firme, que desde la perspectiva ofensiva me dejaría (siendo totalmente sincero) con la boca abierta, destacando ademas del orden del primer tiempo, la eficacia a la hora de contener al rival. Nuestro conjunto quedaría con 10 ante una chiquilinada del 9, que por acumulación de tarjetas dejaba el campo con casi todo el segundo tiempo por jugarse.

Con un hombre menos, los llamados a destacarse eran los de abajo. El rival se adelantaba desde sus centrales y obligaba al Reno a jugar solo en su campo, y teniendo poco y nada la pelota. El llamado antes mencionado, seria respondido de manera notable por todos los defensores tricolores, y en especial por el marsupial arquero. Centro, cabezaso rival, el Chipi que se pasa y en un esfuerzo extremo, se estira para sacar en la linea lo que era un gol casi seguro. Bochon y gran respuesta de un arquero que ademas estaba fino en los saques alegando "seguí picando Jhonny, que alguna va a pasar"

Varias jugadas mas del estilo a la anterior. El rival llegaba con centros y con pelota dominada, pero siempre había un escollo que no podían superar. Cuando no era el Bui, Germán estaba esperando. Por los costados llegaban hasta que los duros Piqui y Chaca decían basta, y encima cuando todo eso no funcionaba, el guardameta estaba en su esplendor, volando de acá para allá con una gran soltura.

Solo un error se le achaca a la defensa, en un intento por salir jugando, nuestro capitán entrego mal la pelota, y lo que podía haber sido (otra vez) gol, volvió a ser un duelo ganado por el arquero.

Por allá perdidos estaban los atacantes, que dispusieron de alguna que otra situación. Primero fue el Bryan, que minutos antes había reingresado con el dedo en la nariz algo desconcentrado. Tuvo una inmejorable situación cuando quedo frente al arco pero su remate se fue desviado.

El honguito montó una corrida enorme por la banda derecha y dejando atrás a dos rivales. Salida regalada del arquero, picada de por medio, y el error, el dedito festejando antes que la pelota ingrese. Travesaño y afuera para un frustrante cierre de la jugada.

Habría revancha porque minutos después, y mediante otra escapada por la banda derecha, el 88 dirigiría un centro para encontrar solo al odiado por algunos Echa, que gracias a un toque certero pondría cifras definitivas al match....... o eso pensábamos.

Derrotando la chicarra, una jugada aislada en el costado izquierdo del ataque rival, derivó en un centro rasante, que nuestro gran Piqui llego a cerrar, con la mala fortuna que su rechazo fue un pifie (quizás la única falla en lo que había sido un partido casi perfecto) permitiendole al delantero rival decorar el resultado. Pero siendo imposible que este error a esta altura del partido y con el resultado, opacara la gran tarea de toda la defensa

3-1 frente a un equipo que venia invicto, y muchísima algarabía que duraría hasta altas horas de la madrugada, en donde parte del plantel navegaría por las calles de San Martin, en busca de festejos, torta y por supuesto, mucho alcohol.

Para cerrar, los puntajes finales, a cargo del siempre querido Marcelo Castello

Chipi (F)  8

Chacal    7
German   7
Piqui       7

Bui         7 

Pucho     5
Gato       6
Bryan      5
Nacho     6

Jhonny    7
Mati        6

Gonza     6
Echa       6

Jonatan "Abelinho" Perez